Él no está en condiciones por ahora de encauzar correctamente su voluntad.
Se abre una grieta y se evita el dolor.
Se abre una herida para que sea sanada del todo, y esto de otro modo no sucedería.
Allí donde resulta difícil tomar una decisión o encarar un desafío se produce una evasión.
La sanación recae sobre la dirección de los deseos e impulsos y la afirmación de la identidad que es la que regula la voluntad.
Hay incertidumbre y desorientación por falta de estímulos.
Las respuestas no son las adecuadas. Es mejor llevar las riendas cortas para no desbocarse.
Un poco de reflexión y de conexión con las emociones vendrá bien aunque se sienta venir el caos. La pregunta clave es ¿de qué escapamos o intentamos escapar?
Luego, con la Luna Nueva de Cáncer el viernes, llegará una mayor integridad emocional.
